viernes, 5 de noviembre de 2010

Test Drive

Hace poco aprendí que a pesar de que Internet es una gran fuente de información, no debemos creer todo lo que leemos. No os creais esas historias oscurísimas de que en Londres es imposible abrirse una cuenta bancaria porque es mentira. Es algo que por miedo no hice hasta la semana pasada, pero que si lo se, lo hago antes. Precisamente anoche, me acerqué al Lidl de al lado de mi casa a por provisiones. Tenía una cesta llena de cosas sanas y ricas, pero cuando fui a pagar me dieron la mala noticia de que ninguna de mis tarjetas de crédito / débito españolas funcionaban para pagar. Segundo contratiempo de este tipo que me encuentro desde que soy medio británica. Así que con cara de vergüencita y a la vez molesta, tuve decidir cuáles serían mis artículos de primera necesidad y cuales debía dejar en la tienda en relación con el efectivo que llevaba en el monedero, que como todos sabéis, a penas llevo nunca. ¬¬

Y es que siendo estudiante, la verdad es que todo está saliendo bastante fácil. Me acerqué al Barclays de la esquina de Seven Sisters Road y me ofrecieron dos cuentas. Una aparentemente carente de beneficios y gratis, para clientes internacionales, y una segunda, de cuyo nombre no quiero acordarme, que por 8 libras (!!!!!!) al mes me ofrecían el oro y el moro.

8 x 12 meses = 96 libras al año. No f-ing way.

Seguidamente me acerqué al Lloyd's de Highbury & Islington, y de igual modo, me ofrecieron una cuenta clásica y por tanto básica gratuita y otra llamada Silver, con todo tipo de seguros y promesas, que por estrenarla tan solo me cobrarían 3 libras y a partir del tercer mes serían 7. Nada nada. deme usted la classic, por favor. Me dieron cita para el lunes, y tan solo con una carta de la universidad y mi pasaporte, pude abrir sin problema alguno mi cuenta. A los dos días tenía en mi casa el sobrecito de bienvenida del banco.

En internet he podido leer toda clase de historias para no dormir sobre los documentos necesarios para abrir una cuenta y demás impedimentos imposibles por parte de los banqueros para no querer abrirla. Pero supongo lo obvio, si no tienes ni papa de inglés y no tienes pinta de que vayas a ingresar mucho en tu cuenta, es normal que se pongan tontos.

Así que prueba de introducción a la vida británica número 3, completamente superada.

Quizá la prueba número 4 la podríamos contar con lo ocurrido la semana pasada. Vino un "ingeniero" a reparar uno de los hornos de la casa y tenía que abrirle yo la puerta y explicarle el problema. Problema ninguno, en cuanto a comunicación, superé la prueba sin problemas. Eso si, el horno sigue sin estar reparado.

Todas las semanas ocurre algo emocionante en el metro. Este miércoles había huelga, otra vez. Realmente empezó el martes por la noche y continuó todo el dia siguiente. Entre la huelga, el incómodo viento fuera y que con el nuevo cambio horario aquí empieza a oscurecer a las 4 (!!!!!) decidí que era dia de estar en casa, adecentar un poco bastante mi habitación y aprovechar para socializar con los flatmates.

El resultado: un buen batch de galletas de mantequilla, que prometo que irá mejorando con el tiempo, ya que toda repostería echa en casa ajena siempre resulta un poco violenta. No estuvo mal para ser la primera tanda.




Volviendo al tema oscuro de los bancos, hoy debería recibir mi esperadísima tarjeta de débito inglesa. Por fin podré top-up-ear todo lo que quiera online sin el problema de mis tarjetas españolas.

En cuanto a las clases. Ya está un poco dominado el tema de la orientación entre y dentro de los campus. Las primeras semanas fueron un poco agobiantes. Demasiados edificios, demasiados códigos de las clases y todo demasiado separado. Ahora voy teniendo un poco más claro donde están las cosas y cómo ir por lugares alternativos. Los edificios de esta universidad son curiosos. Hay partes que están renovadas recientemente, muy modernas, con muchos colores, muchas pantallas glossy y por otro lado, te encuentras de vez en cuando pasillos con olor a biblioteca vieja, o baños que parecen sacados de un internado de los años 40. Pero mola. Es una mezcla muy extraña que no se veía en la URJC de Madrid y que le da un puntillo de sorpresa a la estancia universitaria. Es interesante buscar un libro en la biblioteca y descubrir que alguien más lo cogió en los años 80 o 90, cuando yo tendría 3 o 4 años, y levantar un poco la pegatina y comprobar que efectivamente esto era antes la University of North London o la London Guildhall University, y que las páginas están más amarillas que los dientes de un fumador de tabaco negro (xD).


Edificio modernuki, donde están la cafetería, el servicio de estudiantes y demás cosas comunes.


Stapleton House. Donde damos clase de Management.


El Towerbuilding, donde está el Rocket Complex y por detrás, el departamento de polímeros y los laboratorios Old School del primer dia (y espero que no último)

http://www.londonmet.ac.uk/about/history-of-north-campus.cfm

Y los jueves al centro, al edificio de Commercial Road en Aldgate East.


Donde damos la clase de Autocad y donde está nuestra biblioteca. Es de las más pequeñas, pero la más molona en cuanto a libros, ya que justo en ese edificio están todos los estudiantes de diseño, moda, joyería etc, así que la más "creativa", con libros chulos de plásticos y tal.

Por último, el edificio más retirado de todos, y creo que de los más viejos también. Huele a Complutense verdad?




Eso es todo por hoy amigos. Espero poder disfrutar de alguna Bonfire Night.

Feliz Diwali!!!

2 comentarios:

  1. Enhorabuena..si tienes tarjeta eres persona humana..pero hasta entonces no serás más un simpático duendecillo...
    P/LAS imágenes antigüas lucen como las de un internado de película de terror clase B..ummmm ¡¡interesante ¡¡¡

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  2. Como has aguantado tanto sin tarjeta inglesa??
    Estoy alucinada.. Yo pensaba que te daba alergia el efectivo!!
    besitos: Mery Deca

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